¡Una partida de ajedrez inolvidable! (micro cuento en español y portugués)
El ruido del movimiento de las piezas era el único sonido que se escuchaba en el comedor del colegio Inmaculada donde se realizaba el campeonato. Estaba prohibido, para todos los participantes hacer cualquier otro ruido, lo cual no era ningún problema, ya que para la mayoría de los jugadores el silencio era un compañero inseparable en todos los entrenamientos y torneos. En mi cuaderno yo anotaba la jugada de apertura de la defensa “Ruy López” que usaba cuando me tocaba jugar con piezas negras. Mi contrincante ya había anotado la suya que era el primer movimiento de la “siciliana” que ella usaba siempre. Ella no me miraba mientras jugaba, yo podría decir que hasta me ignoraba de cierta manera ya que, para ella, yo era una contrincante con un nivel inferior al suyo. Ese partido era la final del campeonato femenino de ajedrez categoría mayores de ADECORE donde se enfrentaban mi colegio, Regina Pacis, con el colegio Juan XVIII, compitiendo, cada colegio, con dos jugadoras que disput